Entendiendo nuestra mente: Parte 3 - La “autoestima” desde la perspectiva Bíblica
Amados hermanos y amigos, la moderna psicología ha creado un concepto para describir la “valoración de las propias habilidades y el valor de uno mismo” le llaman “autoestima”, aunque los maestros de psicología han debatido durante décadas si la autoestima es un constructo que realmente existe. La pregunta que debemos hacernos es ¿Es importante como creyentes entender el sentido que tiene esta palabra “autoestima”? Mi respuesta es Si, ya que podemos encontrar un lado positivo a este concepto, pero dentro de las diversas sociedades que existen en este Mundo este concepto se ha convertido peligroso, ya que ha creado un grado de falsedad sobre cómo debe ser un individuo que se estima a sí mismo, pero para llegar a eso debe ser un ser egoísta extremista, e individualista, lo que puede traer grandes consecuencias negativas.Definición de autoestima = Aprecio o consideración que uno tiene de sí mismo.
Definición de constructo = en psicología significa, cualquier entidad hipotética de difícil definición dentro de una teoría científica. Un constructo es algo de lo que se sabe que existe, pero cuya definición es difícil o controvertida. Son constructos la inteligencia, la personalidad y la creatividad, por ejemplo.
La autoestima según lo entendido por la mayoría de las personas es donde se encuentra el valor y la manera innata dentro de ellos mismos. Es decir, usted tiene valor como persona debido a su carácter, personalidad, habilidades o incluso debido a su cuerpo. En este sentido, el valor se deriva únicamente de cómo nos percibimos a nosotros mismos. Si una persona piensa que es bastante bueno en el béisbol, o bueno en el soccer, o cree que es bien parecido físicamente, o tiene una fuerte fortaleza moral, o que es más inteligente que las otras personas. Para la psicología tener una buena “autoestima” depende de lo que la persona piensa o se hace creer de ella misma, aunque sea o no sea cierto.
Filipenses 4:6-7 - “Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”
Romanos 12:2 - “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
