¿Qué Significa Morir y Vivir para Cristo? Una Esperanza Más Allá de la Muerte Física
Amados hermanos y amigos, muchas veces hablamos de cómo vivir con propósito, de cómo encontrar sentido a la vida, de cómo alcanzar metas. Pero pocas veces nos detenemos a considerar la muerte, y lo que ella representa para aquellos que hemos nacido de nuevo en Cristo Jesús.
La realidad es que vivimos en un tiempo donde muchos creyentes o nacidos de nuevo en Cristo buscan como darles sentido a sus vidas según ellos entienden o tal vez fueron enseñados por otros, pero muy pocos se detienen a pensar en lo que realmente significa vivir y morir según La Palabra “Pura e Inalterable” de Dios. No te dejes engañar...
Para el seguidor de Cristo, la vida no se trata simplemente de existir o alcanzar logros temporales o personales, sino de realmente vivir para aquel que nos salvó del pecado y de la muerte, Cristo el Crucificado. Pero esa vida plena comienza con una muerte: la muerte al yo, al pecado y a los deseos de la carne.
En esta primera parte reflexionamos sobre lo que significa vivir para Cristo y morir a uno mismo, según las Escrituras. Veremos que morir para Cristo no es perder, sino ganar; que vivir para Él no es una carga, sino libertad; y que en esa entrega diaria encontramos nuestro verdadero propósito y la bienaventurada esperanza de la eternidad.
Este escrito no es solo una reflexión; es un llamado a meditar profundamente en lo que significa vivir según nuestro Dios y Su Palabra "Pura e Inalterable". Abordaremos preguntas esenciales como:
¿Qué significa realmente vivir para Cristo?
¿Qué ocurre en la muerte física?
¿Dónde estarán los que mueren en Cristo?
¿Y qué sucederá con los que participen del arrebatamiento?